Tras la polémica generada por María Clemente, diputada federal de Morena, debido al oficio que desempeña como trabajadora sexual, defendió su trabajo ante los medios de comunicación.
La legisladora transexual dejó en claro que tiene derecho a ejercer el oficio que desee.
“Voy a arremeter contra quien todos los que quieran violar mis derechos. Los derechos humanos me respaldan, la Constitución me respalda, no necesito a nadie más”.
Añadió que los videos difundidos son pornográficos: “Yo produzco pornografía, me pagan por hacerlo”, agregó.
En este punto la legisladora dijo que hay más colegas que, además de ser servidores públicos, atienden tareas laborales ajenas a su cargo.
“Lo siento, mi oficio es ser puta, y tengo derecho a ser puta”.Indicó que el Comité de Ética de la Cámara de Diputados revisará su caso.