El primero ministro Justin Trudeau discute con un joven que está en contra del aborto y lo invita a reflexionar y a rezar un poco más.
Trudeau explica al joven una propuesta sobre la salud dental para las personas de escasos recursos, la cual, detalla, el Partido Conservador rechazó.
El joven continúa la conversación diciendo que “principalmente el aborto libre está en contra del cristianismo.
“Ok, ok, ¿crees que las mujeres deberían tener el derecho de decidir qué pasa con sus propios cuerpos? ¿Crees que tú deberías poder decidir lo que le pasa al cuerpo de una mujer?”, interroga Trudeau.
Después, el joven dice que está a favor de la elección, lo que sorprende al primer ministro, quien le pregunta: “¿Acabas de decir que estás a favor de elegir?”, e inmediatamente el joven lo niega: “No, no, soy provida”.