La especulación sobre la posibilidad de que Apple adquiera Disney no es un asunto nuevo. Desde la época de Steve Jobs, las relaciones entre ambas compañías han sido notables. Sin embargo, la dinámica cambió con la crisis desencadenada por el ex CEO Bob Chapek y el retorno del presidente ejecutivo que revivió a Disney, Bob Iger. Esta nueva alineación de líderes ha transformado la situación entre Apple y Disney, creando un tándem aparentemente ideal. ¿Es factible y deseable que Apple adquiera Disney? A continuación, examinaremos esta cuestión.
Desde 2006, circula el rumor debido a la presencia de Jobs como presidente y máximo accionista de Pixar, cuya compra por parte de Disney le otorgó un puesto en el consejo ejecutivo. Además, la estrecha relación entre ambos CEOs desestimuló la especulación. En ese entonces, Disney mostraba signos de declive, mientras que Apple estaba en su apogeo.
El lanzamiento de Apple TV+ y sus logros en ventas y calidad cinematográfica ha llevado a analistas a sugerir que, para consolidarse en el sector de servicios, Apple debe considerar una transacción significativa, como la adquisición de Disney. Esta opción es atractiva ya que Apple tendría un vasto universo para explotar en conjunto con el crecimiento del producto insignia de la era Tim Cook: Vision Pro.
La aparición de Apple Vision Pro reavivó los rumores de compra, ya que ambas compañías podrían competir en contenidos similares. Si Apple busca proporcionar a sus usuarios contenido 3D emocionante, adquirir Disney o al menos una sección de ella sería necesario.
Sin embargo, Apple solo estaría interesada en adquirir una sección específica de Disney, no la compañía en su totalidad. Por ejemplo, podría comprar la sección de Star Wars o Marvel, pero no se aventuraría en el mercado de parques temáticos ni juguetes. El CEO de Disney, Bob Iger, busca vender secciones deficitarias para establecer bases de ingresos sólidas. Aquí es donde Apple podría intervenir y adquirir una sección no deseada por Disney. Sin embargo, si Disney vende su negocio de televisión, sería lógico que también vendiera Disney+, de lo contrario, carecería de sentido para Apple.
Existe una tercera vía posible en esta coyuntura entre Apple y Disney. Dado que Apple lanzará su primera película en cines, ambas compañías podrían colaborar en nuevas producciones para ambas plataformas. Apple cosecharía ganancias del cine y atraería más usuarios a su ecosistema. Disney podría incrementar ingresos y reducir riesgos financieros asociados a posibles fracasos cinematográficos.
En conclusión, la idea de Apple adquiriendo Disney es un tema complejo y multifacético que involucra dinámicas de liderazgo, estrategias comerciales y oportunidades de contenido. Aunque la posibilidad no se descarta por completo, varios factores técnicos y comerciales deben considerarse antes de tomar una decisión definitiva.