En un sorprendente cambio de rumbo, las investigaciones sobre la trágica muerte del destacado rapero venezolano Tirone José González, conocido como Canserbero, han descartado la tesis original del suicidio. El Ministerio Público de Venezuela ahora se centra en la posibilidad de un asesinato, con sospechas que apuntan hacia colaboradores cercanos, incluyendo su mánager.
El fiscal general, Tarek William Saab, desecha por completo la idea del suicidio y afirma que “se está imponiendo la tesis del asesinato por motivos económicos”, según declaraciones recogidas por la agencia EFE.
A diferencia de la versión inicial, que sugería que Canserbero se lanzó desde un décimo piso después de presuntamente apuñalar a su amigo Carlos Molnar, bajista del grupo de reggae Zion TPL, ahora se plantea la posibilidad de que el rapero fuera apuñalado antes de caer y que sufriera al menos un golpe contundente. La reciente exhumación de su cuerpo el pasado 23 de noviembre respalda esta nueva línea de investigación, mientras que el fiscal del caso sugiere la posibilidad de que Canserbero haya sido sometido a tortura antes de su fallecimiento.
Contrariamente a la teoría original, el fiscal general descarta que Canserbero haya asesinado a Carlos Molnar antes de quitarse la vida. En cambio, se cree que hasta seis personas podrían estar involucradas en ambas muertes, siendo Natalia Améstica, la mánager del rapero, la principal sospechosa de liderar la presunta conspiración.
La revisión de las hipótesis se realiza a raíz de las peticiones de los familiares del artista y de los fanáticos que nunca aceptaron las versiones iniciales después de la muerte en 2015 de quien fue considerado por la revista ‘Rolling Stone’ como el mejor rapero de la historia en español.