Luego de darse a conocer que civiles armados habían montado un retén en Badiraguato, Sinaloa, Andrés Manuel López Obrador minimizó el hecho asegurando que “no pasa nada”.
Este retén fue instalado en la carretera que va de Badiraguato, Sinaloa, al municipio de Guadalupe y Calvo, en Chihuahua, donde AMLO se encontraba de gira para para supervisar esta obra y los avances del programa Sembrando Vida.
Dicho retén estaba ubicado aproximadamente a 30 minutos del rancho La Tuna, donde vive la madre del líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín “El Chapo” Guzmán fue instalado un retén con civiles armado que portaban cuernos de chivo y chalecos antibalas, con hasta ocho cargadores.
Los civiles fueron captados por un grupo de periodistas quienes se dirigían a cubrir los eventos de AMLO en la región de Guadalupe y Calvo.
Al rededor de 10 civiles armados paparon el camión en el que viajaba un convoy de prensa que se dirigía a un evento del mandatario estatal, cuestionando a los periodistas si llevaban armas, a lo que respondieron que ninguna, solo cámaras, mismas que los sujetos pidieron que estas permanecieron apagadas hasta llegar al evento.
Posteriormente el grupo de civiles armados permitió el paso del convoy con los periodistas y solicitó el traslado de un adulto mayor a la localidad de Los Frailes.
Al ser cuestionado sobre el incidente de los periodistas, el mandatario federal respondió que fue informado hasta el día sábado 28 de mayo.
“No pasa nada, no pasó nada afortunadamente”, enfatizó AMLO sin brindar más detalles de lo acontecido”.