En un inusual día de entrenamiento, los Seattle Seahawks fueron testigos de varias peleas durante su práctica reciente. La tensión entre los jugadores aumentó cuando se produjeron múltiples enfrentamientos físicos, alterando la dinámica de la sesión.
“La competitividad es alta y la intensidad también,” declaró el coach Pete Carroll. Las disputas, aunque inesperadas, se consideraron parte del proceso de preparación. Carroll enfatizó que tales incidentes no afectan el enfoque del equipo para la próxima temporada. “Es una oportunidad para que los jugadores muestren su carácter y fortaleza,” comentó el entrenador.
Los Seahawks buscan ajustar su cohesión y química interna antes del inicio de la temporada, y estos eventos pueden ser un reflejo de la determinación de los jugadores por hacerse notar.