Sony anunció recientemente el PS5 Pro, una versión mejorada de su popular consola PlayStation 5, lo que provocó una oleada de compras de la unidad Blu-ray del PS5 original, la cual se agotó en varios mercados.
Aunque el lector de discos recibió críticas en sus primeros años por ser caro y poco eficiente, los jugadores se apresuraron a adquirirlo antes de que sea completamente reemplazado por el PS5 Pro. Un representante de Sony comentó que “la demanda ha superado nuestras expectativas”, lo que refleja que aún hay una gran base de usuarios interesados en el formato físico.
Aunque la tendencia global se inclina hacia las descargas digitales, muchos jugadores prefieren el formato tradicional para sus colecciones de videojuegos. Este fenómeno ha generado debates sobre el futuro de las consolas y el rol de los medios físicos en una era cada vez más digital.