Tras los recientes despidos en Xbox, Microsoft emitió una inesperada orden a sus empleados con el fin de evitar una polémica mayor. Según información compartida por fuentes internas, la compañía solicitó a sus trabajadores no hacer ninguna mención pública de los despidos en redes sociales.
Esta medida ha generado sorpresa, ya que, tradicionalmente, los despidos en grandes empresas tecnológicas suelen venir acompañados de comunicados oficiales y apoyo a los empleados afectados. Sin embargo, Microsoft optó por una estrategia de silencio, buscando minimizar el impacto mediático y evitar que el tema tome relevancia pública.
“Queremos ser cuidadosos con la manera en que esto se maneja externamente”, habría señalado un alto ejecutivo. Esta decisión ha sido percibida como inusual, especialmente en un contexto donde la transparencia suele ser clave para manejar la opinión pública. Los despidos en Xbox se suman a los recortes masivos que Microsoft ha realizado este año en diferentes divisiones.