Seis venezolanos, entre ellos una mujer embarazada, se cosieron la boca con hilo en la Central de Autobuses de Monterrey, en protesta porque la Central de Autobuses no les permite obtener boletos con destino a Ciudad Acuña, aledaña a Texas.
“Tengo 9 meses de embarazo, nos tienen aquí sin comer en el piso, no nos dejan pasar ni al baño, nos tratan como unos perros. Nos tratan mal, la Migración, la policía, en la terminal nos roba, como si no tuvieran familia, ya tenemos cuatro días”, dijo a gritos Alexandra, de 20 años y originaria de Caracas antes de que le cosieran parcialmente los labios.
La primera en coserse los labios fue la joven Yahely Díaz, con un bebé en brazos que era rodeada por sus compatriotas venezolanos, mismos que mostraron su repudio contra las autoridades por no permitirles el libre tránsito a la ciudad Fronteriza de ciudad Acuña, Coahuila.
“¡Las tijeras, las tijeras, por favor”, gritaba el joven que ayudaba a coser los labios a los cuatro hombres y dos mujeres.
Uno de ellos, agarró la aguja y el hilo y sin ayuda comenzó a coserse los labios a sí mismo.