Cada 21 de enero se celebra el Día Internacional del Abrazo, una oportunidad para reflexionar sobre los beneficios que esta sencilla muestra de afecto tiene en la salud física y emocional. Según especialistas de la UNAM, dar o recibir entre cuatro y ocho abrazos diarios ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, reducir el estrés y mejorar el bienestar general.
El Día del Abrazo fue instaurado en 1986 por Kevin Zaborney para promover las muestras de afecto en público. Los abrazos incrementan la producción de serotonina y dopamina, hormonas relacionadas con el placer y la felicidad. Además, reducen los niveles de cortisol, asociado al estrés, y contribuyen a mantener la salud neuronal, explicó Alicia Castillo Martínez, académica de la Facultad de Medicina de la UNAM.
En las personas mayores, los abrazos pueden estimular la memoria y reforzar el sentido de pertenencia, previniendo problemas de salud mental. La falta de este tipo de contacto en la infancia puede generar alteraciones emocionales y sociales en la vida adulta.
#DíaDelAbrazo #SaludEmocional #UNAM #Bienestar