El equipo McLaren ha implementado una solución innovadora para combatir las altas temperaturas en su monoplaza MCL39, utilizando un depósito de hielo seco en el habitáculo, autorizado por la FIA.
Esta medida busca mantener al piloto en condiciones óptimas durante carreras con temperaturas extremas, como la reciente en Barcelona, donde el asfalto alcanzó los 50 grados Celsius.
Además, McLaren ha desarrollado sistemas para evacuar el calor de los vientres y las ruedas, mejorando la fiabilidad del vehículo y evitando problemas como los sufridos por Mercedes en carreras recientes.
La FIA ha aprobado el uso del depósito de hielo seco, siempre que no entre en contacto con el combustible, ya que enfriar el combustible está prohibido por el reglamento técnico de la F1.