La segunda temporada de Landman, serie creada por Taylor Sheridan, ha retomado su producción esta semana en Fort Worth, Texas, luego de un inesperado traslado a Oklahoma. Según informa Fort Worth Star-Telegram, el regreso al estado donde comenzó el rodaje podría marcar un punto de inflexión tanto en la historia como en la atmósfera de la serie.
Durante los meses de abril y mayo, el equipo ya había filmado en Fort Worth, pero el reciente paso por Oklahoma ha despertado especulaciones sobre un cambio importante en la narrativa. Aunque los detalles oficiales de la trama aún se mantienen en secreto, este “viaje” físico parece estar acompañado por una evolución narrativa significativa.
La producción ha sido descrita como “ajetreada” debido a los múltiples desplazamientos, lo cual también sugiere una ambición mayor en términos de escala y profundidad para esta segunda entrega. Sheridan, conocido por series como Yellowstone, acostumbra a utilizar el paisaje como un personaje más, por lo que este cambio geográfico podría influir directamente en el tono de la historia.
El regreso a Fort Worth representa una vuelta a lo familiar, pero con una promesa clara: explorar nuevos terrenos, tanto literales como emocionales.