Mat Piscatella, analista de Circana, advierte que el modelo “juegos como servicio” (GaaS) representa una amenaza mayor para la industria que plataformas como Game Pass.
Según datos recientes, el gasto en suscripciones de videojuegos en EE. UU. alcanzó los 600 millones de dólares en mayo, un récord mensual histórico y el tercer mes consecutivo al alza.
Piscatella señala que la inflación en rubros básicos está llevando a los consumidores a buscar “una buena relación calidad‑precio”, haciendo de estos servicios una opción atractiva
No obstante, advierte que los títulos GaaS más populares acaparan la mayoría de las horas de juego en plataformas como PlayStation y Xbox, dejando a un lado lanzamientos menos recurrentes.
Este dominio reduce el espacio para que nuevos proyectos independientes o unipersonales se desarrollen, pues los recursos se desvían hacia la creación y mantenimiento de estos modelos continuos .
En resumen, aunque las suscripciones como Game Pass generan debate, el verdadero peligro –según Piscatella– radica en la saturación de GaaS, que condiciona hábitos de consumo, monopoliza atención del mercado y podría limitar la diversidad y la innovación en la industria de los videojuegos.