La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) pidió al Instituto Mexicano del Seguro Social la reparación integral del daño para una joven que perdió ambas piernas, un ovario y el útero debido a una negligencia médica en un hospital en Querétaro.
La CNDH emitió la recomendación al director general de IMSS, Zoé Robledo debido a que transgredieron los derechos a la protección de la salud, a la integridad personal, a la salud sexual y reproductiva, y dañaron de por vida a una mujer de 27 años por diagnóstico, tratamiento y seguimiento médico inadecuados.
“La CNDH considera que el pronóstico de vida de la víctima es grave por las complicaciones derivadas de la inadecuada atención médica que le dejaron secuelas permanentes en la función deambulatoria, al amputársele ambas extremidades inferiores y obligándola a usar prótesis. Se hace notar que, si bien la amputación de extremidades se llevó a cabo para salvar la vida de la víctima ante el avance de la infección, este procedimiento aplicado fue resultado de una inadecuada atención médica, un diagnóstico deficiente e incompleto y de un inadecuado seguimiento de control, que permitieron el avance importante de la infección que pudo prevenirse”, señala la recomendación.
De acuerdo con un comunicado, la víctima acudió al hospital para que le retiraran un Dispositivo Intra Uterino (DIU) que se encontraba mal colocado, sin embargo los médicos practicaron un procedimiento erróneo, lo que pudo desencadenar una infección generalizada y, en consecuencia, la amputación de ambas piernas, la extirpación del útero y un ovario.