Margarita Ceceña Martínez fue agredida por su hernana y su cuñado quienes le prendieron fuego tras rociarla con gasolina, Margarita falleció después de permanecer casi un mes internada en el hospital a consecuencia de las quemaduras de segundo y tercer grado que sufrió en el 70 por ciento de su cuerpo, los hechos ocurrieron en Cuautla Morelos el pasado 1 de julio.
Margarita, de 30 años, determinó tomar el traspaso de una tienda de abarrotes, factor por el que inició una serie de agresiones verbales en su contra por parte de dos de sus primas, sus esposos y su tía, hermana de su madre.
A mediados de mayo fue brutalmente golpeada por el grupo de familiares, tres mujeres y dos hombres.
Acudió a la Fiscalía de la Región Oriente pero no le quisieron iniciar la denuncia porque “no lo ameritaba, le dijeron que esas eran lesiones menores que básicamente tenía que ir muriendo o muy herida para poder tomarla”, narró Andrea, madre Margarita.
El 1 de julio, coincidieron en el centro y ahí iniciaron las agresiones. Más tarde, Margarita, junto con su madre e hijos, arribaron a la tienda.
El grupo de familiares, las dos primas, sus esposos y la tía, una de ellas con machete en mano, se abalanzaron contra Margarita con insultos.
Primitivo, cuñado de Margarita, se acercó con un galón lleno de gasolina y en segundos roció el contenido sobre Margarita y su familia, Andrea, su hijo adolescente y la niña alcanzaron a correr.
El Instituto de la Mujer para el Estado de Morelos (IMM) hizo un llamado a las autoridades estatales para evitar que el crimen quede impune.
“Repudiamos estas acciones y exigimos la inmediata detención de las personas responsables, así como la articulación de las autoridades que, por sus facultades, deben actuar en favor de las víctimas, directa o indirectas, a efecto de garantizar en primer término su seguridad y acceso a la justicia con perspectiva de género”, señalaron.
Andrea, madre de Margarita, denunció que a pesar de que presentaron una denuncia en la Fiscalía de la Región Oriente, hasta este momento las autoridades no han hecho nada.
“Le preguntamos a la licenciada que nos atendió en la Fiscalía por qué no los han detenido y su respuesta fue que le investiguemos, dónde están para que manden a alguien a detenerlos, pero me advirtió que debe ser seguro porque si no ella se mete en problemas”, agregó.