En una escalada de violencia que ha sacudido a Puebla en las últimas semanas, se han localizado los cuerpos sin vida de tres individuos con señales de brutalidad en las inmediaciones de la carretera Cuacnopalan-Tlacotepec, cerca del municipio de Palmar de Bravo. Este trágico hallazgo eleva la cifra de ejecuciones en la región a un alarmante total de 26 personas asesinadas.
Esta ola de violencia se ha caracterizado por una feroz disputa territorial entre grupos delictivos. Tan solo en los últimos días, los enfrentamientos a tiros han dejado un saldo de 21 víctimas mortales, con seis personas asesinadas en una junta auxiliar de Canoa, cuatro descuartizadas en Amozoc, cinco ejecutadas en el mercado Morelos y seis adicionales en un tiroteo en Xoncatepec.
El 1 de noviembre, se llevó a cabo la detención de Jesús N. y/o Tomás N., apodado “El Malverde”, quien operaba en la región de Cañada Morelos, una zona contigua a Palmar de Bravo. Este arresto parece haber desencadenado una escalada en la rivalidad entre grupos del crimen organizado por el control de esta área.
El secretario de Seguridad del Estado, Daniel Iván Cruz Luna, ha señalado que al menos tres bandas de narcomenudistas se encuentran bajo sospecha de estar detrás de esta ola de violencia. Identificadas como “Los González,” “Los Malverde,” y “Los Tepeacas,” estas organizaciones delictivas han sumido a Puebla en una crisis de seguridad que exige una respuesta inmediata de las autoridades.