En su visita a Baja California, el presidente Andrés Manuel López Obrador recalcó su respaldo a la gobernadora del estado, Marina del Pilar Ávila, luego de que el senador de Morena, Jaime Bonilla Valdez, la acusara de pactos con el crimen organizado.
“Cuenta con nuestro apoyo y aún más, con nuestra simpatía, entonces venimos a decirle que no está sola, que el gobierno federal la va a apoyar siempre”.
“La considero una mujer buena, con principios que ha enfrentado muchas adversidades y ha actuado con aplomo, con rectitud, y el presidente de México la apoya, y todo el gobierno, que no haya duda. No debemos de confundir las cosas, esto no es de amiguismo, ni de influyentismo, ni de nepotismo, mucho menos de corrupción, nada de esas lacras de la política tradicional, del viejo régimen”.
Luego de los disturbios ocurridos contra vehículos y establecimientos en Tijuana, Playas de Rosarito, Ensenada, Mexicali y Tecate, el mandatario externó su apoyo al gobierno estatal; mencionó que los hechos afectarían al gobierno federal y no a Baja California.
“Lo que pasó en BC tenía que haber sido un acuerdo previo de los cárteles, en lo particular el Jalisco Nueva Generación, en donde le hizo un reclamo a la gobernadora en una manta inmensa, con señalamientos particulares de su nombre y apellido donde le dice que violó el acuerdo”.
Mientras tanto, Ávila Olmeda indicó que los que efectuaron las quemas y bloqueos, se toparon con un brazo fuerte.
“Hace una semana algunos cobardes quisieron asustarnos y se toparon con un brazo poderoso se encontraron con un pueblo uniformado porque hoy el Ejército Mexicano, la Marina, la Guardia Nacional, la fiscalía General de la República, la fiscalía del estado, las secretarías de seguridad ciudadana y cada una de las policías municipales formamos un solo frente”.
