Un oficial de policía encargado de salvaguardar a los trabajadores en la lucha contra la polio en el noroeste de Pakistán fue brutalmente asesinado por hombres armados, según lo informado por un funcionario el martes.
Al menos 19 agentes policiales han perdido la vida en lo que va del año mientras brindaban seguridad durante las campañas de vacunación en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa.
Los agresores abrieron fuego contra un equipo que realizaba labores en el distrito de Bajaur, acabando con la vida del agente en el lugar, según el oficial de policía Dilawar Khan.
Hasta el momento, nadie ha reclamado la responsabilidad por este ataque.
Las campañas de erradicación de la polio en Pakistán continúan enfrentando la violencia. Los grupos militantes atacan a los equipos de vacunación y a la policía encargada de protegerlos, propagando falsas acusaciones de que las campañas son un ardid occidental para esterilizar a los niños.
El lunes dio inicio una campaña de cinco días contra la polio en 13 distritos considerados de alto riesgo en Khyber Pakhtunkhwa. Más de 21,000 equipos se han movilizado para administrar vacunas a 4,423,000 niños menores de cinco años, resguardados por una fuerza de más de 32,000 agentes policiales.
Pakistán, junto con su vecino Afganistán, sigue siendo uno de los dos países donde la polio continúa propagándose sin control.
Esta enfermedad, que puede causar parálisis e incluso la muerte, afecta principalmente a niños menores de cinco años y suele propagarse a través del agua contaminada.
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