En una mañana de terror en Tabasco, al menos ocho vehículos fueron reducidos a cenizas en cuatro tramos diferentes de carreteras del municipio de Cárdenas, dejando a su paso un rastro de destrucción. Incluso un camión repartidor de Coca Cola no escapó de las llamas, mientras que automovilistas desesperados compartieron angustiantes videos de la devastación.
Pero la pesadilla no termina allí. Se reportaron bloqueos en las principales vías de acceso a comunidades, convirtiendo las carreteras en verdaderas trampas mortales. Una carretera que conecta a Coatzacoalcos, Veracruz, fue bloqueada con un tráiler en llamas, mientras que la salida que lleva a Villahermosa se vio sumida en el caos por otro tráiler estratégicamente colocado para detener el tráfico.
La violencia no cede terreno, ya que se informa de una balacera en la comunidad de Santa Rosa, aunque las autoridades aún no han confirmado este hecho. La incertidumbre prevalece, y las autoridades permanecen en silencio ante estos bloqueos y actos de vandalismo.
Este oscuro episodio de disturbios se suma a la ola de violencia que azotó el municipio de Huimanguillo el mes pasado, y hoy, el miedo se apoderó de las aulas. La Universidad Popular de la Chontalpa y varios planteles educativos, incluyendo tres planteles del Colegio de Bachilleres de Tabasco, tomaron la decisión de suspender clases en aras de “salvaguardar la seguridad de la comunidad”.
Pero la inseguridad no se limita a las carreteras y las aulas. Un ataque armado contra la vivienda del coordinador de Protección Civil del municipio de Cárdenas ha sacudido a la comunidad. Aunque no hubo víctimas mortales ni heridos, el impacto de este acto de violencia es innegable. La calle Santos Degollado fue testigo de este oscuro suceso, y la Policía Municipal ha acordonado la zona, mientras las autoridades buscan respuestas.
Mientras tanto, las fuerzas de seguridad, incluyendo la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Fiscalía General del Estado, han desplegado un operativo para desentrañar los misterios detrás de estos disturbios sin precedentes. La incertidumbre y la tensión siguen en aumento en Tabasco, y solo el tiempo dirá si la tranquilidad volverá a esta región devastada por el miedo.