En el contexto actual, la mención de las palabras “precio” y “videojuegos” genera preocupación entre los entusiastas del gaming. Esta inquietud es comprensible, dado que en los últimos meses hemos sido testigos de un aumento generalizado en los precios de productos relacionados con los videojuegos, como los famosos 80 euros que muchos títulos ahora demandan, así como incrementos en el PVP de consolas como la PS5 y el PS Plus de Sony, y la Xbox Series X|S y el Xbox Game Pass de Microsoft. Esta tendencia de aumentos de precio no se limita al mundo de los videojuegos, ya que también se ha reflejado en la industria del cine y las plataformas de streaming, donde los precios se han elevado de diversas maneras.
Al enfocarnos en el mundo de los videojuegos y los 1500 pesos que actualmente cuestan muchos juegos, es importante destacar que algunas compañías han mantenido sus precios sin cambios. No obstante, parece que estas alzas podrían ser inevitables. Capcom, una de las compañías más reconocidas gracias a títulos icónicos como Resident Evil y Monster Hunter, ha planteado la posibilidad de aumentar los precios en el futuro. Este anuncio está respaldado por diversos argumentos que, aunque pueden resultar difíciles de aceptar, tienen fundamento.
Haruhiro Tsujimoto, presidente ejecutivo y director de operaciones de Capcom, expresó su perspectiva al respecto en una entrevista con el medio Nikkei. Tsujimoto señaló que, en su opinión personal, los precios de los videojuegos son actualmente demasiado bajos, dado que los costos de desarrollo son aproximadamente 100 veces más altos que en la era de la NES. Además, considera que un aumento en los precios de los juegos, acompañado de un incremento en los salarios de los desarrolladores, sería beneficioso y saludable para la industria.
Tsujimoto también reflexionó sobre el estado económico actual y no considera que esté teniendo un impacto significativo en las ventas de la industria del videojuego. En el caso de México, los juegos de Capcom generalmente se venden alrededor de $1,199 pesos.
Si bien es prematuro predecir cuándo y en qué medida se producirán estos aumentos de precio, las declaraciones de Tsujimoto plantean un posible cambio en la dinámica de precios en la industria de los videojuegos en el futuro.