Durante el pasado fin de semana, un grupo de cazadores en Mississippi, Estados Unidos, realizó un acto que ha dejado a muchos usuarios de redes sociales impresionados. En una noche llena de acción y tensión, Tanner White, Don Woods, Will Thomas y Joey Clark se enfrentaron a un cocodrilo de proporciones extraordinarias, que estableció nuevos récords al pesar 364 kilogramos y medir 4.34 metros de largo, superando cualquier medida registrada previamente en el estado.
La caza se llevó a cabo en el río Yazoo, en medio de la oscuridad de la noche. Estos experimentados cazadores de cocodrilos decidieron ir tras un ejemplar de dimensiones gigantescas, sin conformarse con presas más pequeñas, a pesar de haber cazado numerosos cocodrilos de 3.6 metros en el pasado, según testigos del evento citados por el diario local Clarion-Ledger.
Lo que siguió fue una ardua batalla que duró siete horas, extendiéndose hasta la madrugada, entre los cazadores y el colosal cocodrilo. A pesar de la resistencia del reptil, que se sumergía y lanzaba al agua en repetidas ocasiones, los cazadores perseveraron con paciencia y determinación hasta someterlo.
Horas después, llevaron al cocodrilo a tierra firme y confirmaron oficialmente sus dimensiones récord, sorprendiendo a la comunidad. Las imágenes y noticias sobre la hazaña se difundieron rápidamente en las redes sociales, generando admiración entre los aficionados a la caza deportiva y el público en general.
Cabe señalar que Mississippi ha experimentado un aumento significativo en la población de cocodrilos, especialmente en las regiones del sur del estado. Para garantizar la seguridad de los residentes, el Departamento de Vida Silvestre, Pesca y Parques de Mississippi (MDWFP) lleva a cabo una temporada de caza de cocodrilos desde el 25 de agosto hasta el 4 de septiembre de 2023. Es esencial destacar que la caza de cocodrilos sin la debida autorización es ilegal y peligrosa.
El MDWFP ha señalado que los cocodrilos jóvenes suelen desplazarse en busca de nuevos hábitats en la primavera y el verano, lo que puede llevarlos a áreas cercanas a la población. Esto incluye estanques agrícolas, bordes de carreteras, estacionamientos y patios residenciales.
En respuesta a la caza del cocodrilo gigante, una organización dedicada a la conservación animal en Estados Unidos expresó sentimientos encontrados, reconociendo la necesidad de controlar la población de cocodrilos, pero instando a las autoridades a equilibrar la gestión de la población con la conservación de esta especie fascinante en el estado.