Luego de darse a conocer una medida más estricta en el servicio de agua en la entidad, que brinda el líquido solo de 4 am a 10 am todos los días, los regiomontanos han saqueado prácticamente los anaqueles de agua embotellada de las tiendas.
Las imágenes de los lugares vacíos han circulado en redes sociales, dejando en evidencia el pánico que viven las personas con este nuevo programa.
Para surtirse de agua potable los usuarios han tenido que recurrir a hablarle a un camión repartidor, mismo que solo puede ofrecer el servicio una vez por semana.
Incluso hay quienes acuden a los pequeños ríos para poder recolectar agua en varios recipientes y así hacer frente a la crisis de sequía en Nuevo León.