Un intrigante hallazgo revela la posible presencia de un noveno planeta, apodado “Planeta Nueve”, desafiando nuestras concepciones del Sistema Solar. Este enigmático cuerpo celeste, ubicado en los confines del espacio, podría redefinir la estructura planetaria conocida.
Científicos sostienen que este misterioso mundo, inicialmente clasificado como exoplaneta, orbita alrededor del Sol desde la distante Nube de Oort, una región plagada de fragmentos de hielo y cometas a miles de millones de kilómetros de distancia. Aunque su existencia se percibía como una remota posibilidad, nuevos análisis revelan que “Planeta Nueve” está, de hecho, influenciado por la órbita solar.
A pesar de las probabilidades iniciales bajas, un 7%, la noción de que nuestro Sistema Solar pudo haber capturado un planeta de la Nube de Oort despierta la atención científica. “Es completamente plausible que nuestro Sistema Solar haya capturado un planeta de la nube de Oort”, sostiene Nathan Kaib, astrónomo del Instituto de Ciencias Planetarias.
Este supuesto planeta errante, aunque gélido debido a su lejanía del Sol, presenta las condiciones para merecer el título de planeta. ¿Cómo sería este enigmático integrante de nuestro Sistema Solar? Para los investigadores, el “Planeta X” se perfilaba como un gigante de hielo, nacido de desestabilizaciones gravitacionales, que terminó siendo expulsado del sistema.
Las especulaciones sobre este cuerpo, aún no clasificado como gaseoso o rocoso, datan de décadas atrás. Astrónomos han rastreado su presencia no solo en la Nube de Oort, sino también en el Cinturón de Kuiper, sin éxito. “Los planetas sobrevivientes tienen órbitas excéntricas, cicatrices de su pasado violento”, señala Sean Raymond del Laboratorio de Astrofísica de la Universidad de Burdeos. La detección de este esquivo cuerpo resulta, según los expertos, un desafío extremadamente difícil debido a sus características únicas.
Este fascinante descubrimiento abre la puerta a nuevas interrogantes sobre la configuración de nuestro Sistema Solar y despierta la imaginación con la posibilidad de un mundo desconocido que ha permanecido oculto en los límites de nuestro vecindario cósmico.