Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han compilado una lista de las frutas y verduras más saludables, basándose en la densidad de nutrientes, es decir, el contenido de vitaminas y minerales. En lo más alto de esta lista se encuentra el tomate, una fruta ampliamente consumida, especialmente durante el verano.
El tomate, a pesar de su alto contenido en agua, es rico en nutrientes esenciales. Predominantemente compuesto por hidratos de carbono, también es una fuente importante de proteínas, carotenoides y vitamina C. Estas cualidades nutricionales le confieren una serie de beneficios para la salud:
- Mejora la salud ósea: El licopeno, el compuesto responsable del color rojo del tomate, contribuye a mantener los huesos fuertes y saludables. La variedad de ‘tomate pera’ es la que contiene la mayor cantidad de licopeno.
- Ayuda en la pérdida de peso: Gracias a sus propiedades diuréticas y antiinflamatorias, el tomate puede ayudar a controlar el peso al aumentar la sensación de saciedad sin aportar muchas calorías, debido a su contenido en fibra y bajo valor calórico.
- Poder antioxidante: El tomate contiene vitaminas C, A y B en menor medida, todas las cuales combaten la oxidación celular, mejorando la salud de la piel. El licopeno también desempeña un papel importante en este sentido.
- Mejora la digestión: La presencia de pectina en los tomates contribuye a una salud gastrointestinal óptima, previniendo problemas como la diarrea o el estreñimiento.
- Refuerzo del sistema inmunológico: La vitamina C presente en el tomate ayuda a fortalecer las defensas del organismo, protegiéndolo contra infecciones y virus.
La inclusión del tomate en la lista de alimentos más saludables resalta sus beneficios nutricionales y su versatilidad en la dieta diaria.