A medida que la viruela del mono continúa aumentando en los Estados Unidos, la administración de Joe Biden declaró este jueves una emergencia de salud pública nacional por el brote de viruela del mono, en un momento en el que se registran cerca de 7.000 casos en el país.
Con la iniciativa el gobierno espera llevar la respuesta a la enfermedad “al siguiente nivel”, afirmó el secretario de Salud, Xavier Becerra.
La decisión federal se da luego de que los estados de Nueva York y California declararan también un estado de emergencia por el rápido aumento de casos de este virus, endémico de África pero que desde mayo se ha detectado en al menos 75 países.
De la misma forma, el pasado julio la Organización Mundial de la Salud también emitió una alerta global por la viruela del mono.
“La evaluación de la OMS es que el riesgo de viruela símica es moderado a nivel mundial, excepto en la región europea, donde evaluamos que el riesgo es alto. También existe un claro riesgo de una mayor propagación internacional”, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una conferencia de prensa el sábado. “Entonces, en resumen, tenemos un brote que se ha extendido por todo el mundo rápidamente, a través de nuevos modos de transmisión, sobre los cuales entendemos muy poco y que cumple con los criterios del Reglamento Sanitario Internacional”.
Pidió una mayor concentración de recursos para detener el brote, como vacunas y tratamientos antivirales, y que estos recursos se distribuyan a las personas con mayor riesgo de contraer la viruela del mono.
“Con las herramientas que tenemos ahora, podemos detener la transmisión”, dijo Ghebreyesus.
La alerta de la OMS es la última señal de que no será fácil limitar el daño potencial de la viruela del mono de ahora en adelante.