Sin el nocaut que había prometido, pero Saúl “Canelo” Álvarez venció por decisión unánime al boricua Édgar Berlanga y le quitó lo invicto en Las Vegas.
Al son de “Billete Grande”, un narcocorrido de Fuerza Regida que hace apología de “Los Chapitos”, y del crimen organizado, el tapatío retuvo sus títulos mundiales Supermedianos.
“Canelo” envió a la lona a su rival, siete años menor, en el tercer round, pero Berlanga se repuso y dio pelea hasta un emocionante final.
“Antes decían que peleaba con viejos y ahora con jóvenes. Siempre hablan, pero yo soy el mejor boxeador del mundo”, aseveró Álvarez.
Álvarez se impuso con una puntuación de 118-109 en dos tarjetas y de 117-110 en la tercera para retener sus cinturones del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Al final Berlanga abrazó a “Canelo” para agradecerle la oportunidad de combatir en las grandes ligas del boxeo.
“Le dije que era mi ídolo desde que era un niño (…) Él es un rey y puede elegir a sus rivales”, mencionó el boricua.