James Gunn, codirector ejecutivo de DC Studios, compartió con Rolling Stone sus impresiones sobre las expectativas internacionales para Superman, el próximo reinicio cinematográfico del icónico superhéroe. Según Gunn, hay factores culturales y políticos que limitan el atractivo global del personaje, en comparación con otros héroes como Batman.
“[Superman] no es un superhéroe tan conocido en algunos lugares como Batman. Eso afecta las cosas. Y también afecta el sentimiento antiamericano que tenemos en todo el mundo en este momento. Realmente no nos está ayudando”, declaró Gunn.
El cineasta señaló que estas condiciones influyen directamente en la taquilla internacional, aunque dentro del estudio consideran que el desarrollo del proyecto ha sido exitoso hasta ahora. “Creo que es solo cuestión de dejar que algo crezca”, añadió, apuntando a una estrategia de largo plazo para reposicionar a Superman ante nuevas generaciones y mercados.
La película, prevista como piedra angular del nuevo universo cinematográfico de DC, tiene el desafío de reconfigurar al Hombre de Acero como un símbolo universal, más allá de su origen estadounidense y con una narrativa que conecte globalmente.