Juventus comenzó ganando casi desde el inicio, con Dusan Vlahovic marcando a los 4 minutos tras una asistencia de Andrea Cambiaso.
El equipo demostró su solidez defensiva durante todo el partido, confiando en su capacidad para contragolpear. Aunque enfrentó momentos difíciles e incluso fue salvado por el poste en un disparo de Aleksey Miranchuk a los 79 minutos.
Algunos podrían considerar avaro el planteamiento de Massimiliano Allegri, especialmente en la segunda mitad, donde pareció renunciar casi por completo al ataque. Sin embargo, desde el punto de vista del resultado, fue un éxito.
Atalanta también careció de potencia ofensiva, a pesar de dominar la posesión. No lograron crear muchas oportunidades de peligro, en gran parte debido al buen desempeño defensivo de la Vecchia Signora.
Este es el 15.º título de Copa Italia para la Juventus, que esta vez le permite “salvar la temporada” en un año en el que no estuvo en la pelea por el título de la Serie A.