Zelda Williams, hija del recordado actor Robin Williams, ha emitido un enérgico reclamo a través de sus redes sociales: que cesen los videos generados con inteligencia artificial que tratan de replicar la voz o imagen de su padre. Ella calificó esas recreaciones como “repugnantes” y “asquerosas”, y advirtió: “No están haciendo arte, están fabricando asquerosos hot dogs sobreprocesados con las vidas de los seres humanos… luego se los empujan por la garganta esperando que les den un pulgar arriba y un ‘me gusta’”.
La cineasta dejó claro que estos contenidos no son un homenaje digno, sino una forma de explotación digital: “La IA solo recicla y regurgita el pasado para ser reutilizado”, expresó en sus mensajes. Rechazó totalmente la idea de que esos clips reflejen lo que su padre habría querido. En sus palabras: “Créeme, no es lo que él querría”.
Este pronunciamiento no es nuevo: desde 2023, durante la huelga del sindicato SAG-AFTRA, Zelda ya defendía que recrear a actores fallecidos sin su consentimiento cruzaba una línea ética. Su llamado hoy va más allá del daño personal: es una advertencia sobre los riesgos de deshumanizar legados mediante tecnología.