Mel Gibson vuelve a estar en el centro de la controversia por su esperada secuela de La pasión de Cristo. Según información difundida por Variety, grupos católicos ultraconservadores en Polonia han criticado con dureza al director por elegir a la actriz Kasia Smutniak para interpretar a la Virgen María.
Las protestas no se deben a sus capacidades actorales, sino a su postura pública a favor del aborto. Varios simpatizantes del partido Ley y Justicia (PiS) enviaron cartas a Icon Productions, la productora de Gibson, expresando su rechazo a que “una activista proaborto interprete a la madre de Cristo”.
Smutniak, reconocida por su trabajo en cine europeo, ha defendido su libertad de pensamiento, mientras que Gibson no ha emitido comentarios al respecto. La polémica se suma a otras que han acompañado al director en su carrera, lo que aumenta la expectación sobre un proyecto que ya despierta fuertes divisiones entre el público religioso y los defensores de la libertad artística.







