El talentoso delantero de los Denver Nuggets, Nikola Jokic, continúa dejando su huella como uno de los mejores jugadores en la historia de la NBA al asegurar su tercer trofeo como Jugador Más Valioso.
Este premio marca la tercera vez en cuatro temporadas que Jokic se alza con el MVP, sucediendo a Joel Embiid, pívot de los Philadelphia 76ers, quien obtuvo el título en la temporada pasada.
En la votación, Jokic superó a destacados jugadores como Luka Doncic de los Dallas Mavericks y Shai Gilgeous-Alexander del Oklahoma City Thunder, quienes ocuparon el segundo y tercer lugar, respectivamente.
Con este logro, Jokic se convierte en el primer pívot en seis décadas en ganar el MVP tres veces en cuatro temporadas, igualando la hazaña realizada por Kareem Abdul-Jabbar desde 1973-74 hasta 1976-77.
El jugador de los Nuggets, en su novena temporada, destacó por su versatilidad y liderazgo en la cancha, logrando impresionantes cifras en puntos, rebotes y asistencias. Además, se unió a selectos nombres como Wilt Chamberlain y Oscar Robertson al figurar entre los cinco primeros en múltiples categorías estadísticas.
Impulsado por Jokic, los Denver Nuggets lograron una destacada temporada, clasificándose entre los cinco primeros en eficiencia ofensiva, eficiencia defensiva y rating neto. Su presencia en la cancha fue vital para el equipo, demostrando su valía no solo en números, sino también en el impacto que genera en el juego colectivo.
A pesar de sus logros individuales, Jokic mantiene su enfoque en el objetivo mayor: llevar a los Nuggets al campeonato. Con su humildad característica, Jokic prioriza el éxito del equipo sobre los honores personales, mostrando su compromiso con el desarrollo de sus compañeros y el crecimiento del equipo en su conjunto.