Nintendo decidió posponer el estreno de su esperada consola Switch 2 con el fin de otorgar más tiempo a los equipos de desarrollo para perfeccionar los títulos que acompañarían su lanzamiento. La empresa llevó a cabo múltiples retrasos destinados a dar más margen para “pulir” juegos como Mario Kart World y las ediciones Switch 2 de éxitos anteriores. El proceso de refinamiento también abarcó los exclusivos como Donkey Kong Bananza, además de otros videojuegos próximos que debutarán con la nueva consola.
Esta estrategia refleja un compromiso con la calidad desde el primer día: Nintendo priorizó la experiencia final del jugador por encima de una fecha de lanzamiento inflexible. El objetivo fue evitar que los títulos arribaran al mercado sin estar completamente alineados con los estándares de la compañía y con las expectativas de su base de fans.
Con esta decisión, Nintendo busca ofrecer un impacto inaugural sólido y memorable para la Switch 2, mostrando claridad en su enfoque: una consola nueva merece juegos pulidos, innovadores y listos para brillar desde el primer momento.