Marte, el planeta rojo, alberga más vehículos exploradores que algunas regiones de la Tierra. Actualmente, cinco robots han aterrizado en su superficie, pero solo dos de ellos, Curiosity y Perseverance, permanecen activos y desempeñando un arduo trabajo para comprender mejor este mundo marciano y allanar el camino para futuras misiones tripuladas. Estos logros son fruto del aprendizaje adquirido de las experiencias de sus predecesores.
Según revela un estudio publicado por científicos de la NASA en Science Robotics, el rover Perseverance, que llegó a Marte en 2020, ha establecido un nuevo récord de velocidad al recorrer 347.7 metros en un solo día, algo que previamente se consideraba impensable para otros robots en el planeta. Además, ha logrado otro récord al realizar un viaje autónomo de 699.9 metros, la distancia más larga jamás recorrida sin intervención humana en Marte.
La clave para alcanzar este récord de velocidad en Marte radica en las avanzadas cámaras y el sistema de navegación de Perseverance, que le han permitido avanzar eficazmente incluso en terreno pedregoso sin riesgo. Este aumento en la velocidad de desplazamiento ha liberado más tiempo para la realización de investigaciones científicas, un aspecto fundamental para los científicos detrás de este proyecto.
La historia de la exploración de Marte abarca casi dos décadas, comenzando con el rover Sojourner en 1997, un robot del tamaño de un microondas que aterrizó en Marte con la misión de investigar las huellas de una antigua inundación. A pesar de sus limitaciones, Sojourner envió alrededor de 500 imágenes a la Tierra en 85 días terrestres, pero debía detenerse cada 50 centímetros para calcular su siguiente movimiento. Estos obstáculos se han superado gracias al sistema de navegación avanzado de Perseverance, un avance logrado gracias a la experiencia acumulada con sus predecesores: Opportunity, Spirit y Curiosity.
El récord de velocidad de Perseverance ha demostrado su valía al enfrentar un campo de rocas de más de 500 metros de ancho cerca de su lugar de aterrizaje en Marte. En lugar de rodearlo, el rover utilizó sus cámaras y sistema de navegación para encontrar la mejor ruta a través de las rocas, ahorrando tiempo para investigaciones científicas esenciales. Perseverance tiene una misión diversa que incluye la búsqueda de signos de vida en Marte, el análisis de sonidos y la recopilación de muestras del suelo, aunque la entrega de estas últimas a la Tierra aún está en desarrollo.