A través de un comunicado emitido en las redes sociales oficiales, el gobierno estatal informó que de aprobarse la suspensión y el cobro del servicio de agua potable golpearía los ingresos al organismo paraestatal dejando a la entidad sin agua potable.
La iniciativa de reforma a la Ley de Agua Potable y Saneamiento, planteada por diputados del PAN que, de aprobarse el martes, evitaría la suspensión y el cobro del servicio de agua en época de crisis hídrica, podría dejar en bancarrota a Agua y Drenaje de Monterrey y a todo el estado sin agua, según advirtió en un comunicado, el gobierno de Nuevo León.
El gobierno del estado encabezado por Samuel Gracia, informó que, aunque el recibo de agua incluye tres conceptos de cobro: consumo en metros cúbicos, servicio de drenaje y servicio de saneamiento.
Señaló que el cobro de servicio se realiza con base en el agua que se consumió, por lo que ante la disminución del suministro la gente solo paga por el agua que recibe.
“Esta propuesta pone un riesgo muy alto a la viabilidad operativa y financiera de Agua y Drenaje; los ingresos se verían afectados drásticamente, estimamos pérdidas de entre 600 a 700 millones de pesos mensuales, generando así un efecto negativo en la operación del organismo, lo que provocaría no poder enfrentar los gastos de nómina, el pago de servicios como energía eléctrica y otros gastos operativos, de mantenimiento y de inversión”, indicó
“Lamentamos que las y los diputados del PAN hayan presentado esta iniciativa dejando claro que no quieren ayudar a que salgamos de esta crisis”, declaró el Gobierno Estatal.
Finalmente, el Estado recalcó que actualmente ha proporcionado de manera gratuita 5 millones de litros de agua a 234 colonias de diversos municipios.
Sin embargo, el gobierno de Nuevo León subrayó que en caso de que el martes, la Comisión de Medio Ambiente apruebe la iniciativa impulsada por el diputado Carlos de la Fuente, se pondría en riesgo la viabilidad operativa.