En un momento cargado de emociones, Rafael Nadal tomó el micrófono durante la Copa Davis para reflexionar sobre su legado en el tenis. Rodeado de sus compañeros y entrenadores, el español ofreció un discurso que inició con un minuto de silencio, recibiendo el caluroso aplauso de los asistentes en el estadio Martín Carpena de Málaga.
“Me voy con la tranquilidad de dejar un legado”, expresó Nadal, destacando la importancia de sus años en el tenis y los valores que buscó transmitir dentro y fuera de la cancha. El evento marcó una celebración no solo de su trayectoria, sino también de su impacto en el deporte mundial.
El seleccionador David Ferrer y figuras como Carlos Alcaraz se unieron al homenaje, subrayando el ejemplo que Nadal ha sido para futuras generaciones. Aunque su retirada aún no es definitiva, sus palabras y el ambiente del acto sugieren que su carrera está en una fase final.
Este momento refuerza el respeto y admiración hacia uno de los grandes íconos del tenis moderno.