Este martes, el Partizan anunció la incorporación de Bruno Caboclo para las dos próximas temporadas, a pesar de las objeciones de Umana Reyer Venezia, equipo italiano que había fichado al jugador durante el mercado de verano. Aunque Caboclo recibió permiso de la FIBA para unirse al equipo serbio, Reyer Venezia ha expresado su descontento a través de un comunicado oficial.
El conjunto italiano había asegurado los servicios de Caboclo del ratiopharm Ulm durante el mercado de verano. Sin embargo, tras el Mundial, el jugador no se unió a los entrenamientos de Reyer y, alegando motivos personales, buscó rescindir el contrato sin haber debutado.
Caboclo, quien participó en la gira del Maccabi Ra’anana israelí por Estados Unidos enfrentándose a equipos de la NBA, ahora refuerza el juego interior del Partizan de Zeljko Obradovic. La oficialización de su fichaje ha provocado una fuerte reacción por parte del equipo veneciano.
El comunicado de Reyer Venezia destaca la consideración de la decisión de la FIBA como injusta y viciada, al expedir la habilitación para Caboclo a instancias del Club Partizan Belgrado. La expedición de dicha habilitación, en medio de una infracción grave por parte del jugador y la conciencia del nuevo club, es considerada inaceptable por Reyer.
El equipo italiano impugnará esta decisión en todos los foros y medios legales disponibles, comenzando por un recurso ante el Panel de Apelación de la FIBA. Asimismo, Reyer se reserva el derecho a solicitar investigaciones sobre la conducta ilícita de los gestores del jugador y del Partizan de Belgrado, que, a pesar de conocer el vínculo contractual existente con Reyer, procedió con la solicitud de traspaso.
Reyer Venezia subraya la falta de tolerancia hacia un club que se aproveche del rendimiento de un jugador vinculado contractualmente a un posible rival. El equipo reafirma su determinación de continuar la batalla legal contra todos los involucrados en este asunto en todas las instancias posibles, insistiendo en el respeto a los códigos de conducta y valores deportivos básicos sancionados por la FIBA.