La segunda temporada de The Last of Us ha comenzado con fuerza, estrenando un episodio de 58 minutos cargado de emociones, referencias y cambios relevantes respecto al videojuego original. Si bien muchos eventos del juego fueron recreados fielmente, otros elementos han sido modificados para enriquecer la narrativa televisiva.
El capítulo destaca por introducir un nuevo tipo de infectado, lo que promete intensificar la tensión en episodios venideros. Asimismo, el cuarto de Ellie está lleno de guiños al videojuego, incluyendo su diario lleno de garabatos, la emblemática navaja heredada de su madre y el tatuaje que oculta su mordida.
Otro detalle importante fue la introducción de Shimmer, el caballo que tuvo un papel clave en la exploración dentro de The Last of Us Parte 2. La música también mantuvo su esencia gracias a Gustavo Santaolalla, compositor original de la saga, quien incluso aparece brevemente en la escena ambientada en Jackson.
Este primer episodio establece un sólido punto de partida, equilibrando nostalgia y evolución narrativa para satisfacer tanto a los jugadores veteranos como a nuevos espectadores.