Ubisoft ha dado un golpe de timón en sus operaciones a través de una serie de medidas drásticas para superar su crisis financiera. En un comunicado reciente, la empresa reveló que implementará recortes de costos y cerrará varios estudios, además de ajustar sus lanzamientos. Las decisiones han sido tomadas bajo la supervisión de asesores externos y el Consejo de Administración, con el objetivo de “maximizar la creación de valor” en un momento crítico.
A lo largo de los próximos años fiscales, Ubisoft planea reducir sus costes fijos en 200 millones de euros en comparación con los niveles de 2022-2023. Estas acciones forman parte de una estrategia de reestructuración para enfrentar el peor momento financiero de la historia de la compañía.
Ubisoft se enfrenta a uno de los mayores desafíos de su trayectoria, por lo que sus esfuerzos van orientados a garantizar su estabilidad económica. Esta reestructuración no solo afectará a sus operaciones internas, sino también a la forma en que se presentarán los futuros juegos y proyectos de la empresa.