Ethan Hawke compartió momentos íntimos con Robert Redford tras su partida. En su aparición en Jimmy Kimmel Live, el actor narró cómo Redford, a pesar de rechazarlo para El río de la vida en 1992, lo motivó a seguir adelante con una promesa: “vas a tener una gran carrera”. Aun cuando le dijo que era muy joven para el papel, “no fue negativo, porque me aseguró que había hecho un gran trabajo”.
Varios meses después, Redford asistió de forma sorpresiva a una obra teatral underground protagonizada por Hawke y lo felicitó tras bambalinas. También fue uno de los primeros en respaldar Antes del amanecer (1995), promoviendo el filme en su propio Sundance Festival.
Pero quizá lo más revelador fueron sus últimas palabras hacia Hawke: “deja de usar sombrero vaquero, que la gente pensará que te estás quedando calvo”. Esta frase no solo deja ver la cercanía entre ambos, sino también el trato personal que mantuvieron.
Para Hawke, Redford no solo fue una figura inspiradora en el cine, sino un mentor que supo ver potencial incluso cuando otros cerraban puertas. Su legado —más allá de su trabajo frente y detrás de cámaras— se fundamenta también en cómo impulsó a jóvenes talentos.