El fenómeno japonés Alice in Borderland continúa demostrando su poder en el catálogo de Netflix. A pesar de haberse estrenado hace años, sus dos primeras temporadas han experimentado un resurgimiento notable en visualizaciones, impulsadas por el llamado “efecto dominó”, donde nuevas audiencias descubren series ya consolidadas.
Según datos recientes, la temporada 1 se posiciona en el octavo lugar del ranking global de Netflix con 2 millones de visualizaciones de sus ocho episodios. Por su parte, la segunda temporada ocupa el noveno puesto, acumulando 1.5 millones de reproducciones. Este renacimiento mediático refuerza el interés por una posible tercera entrega, cuya producción aún no ha sido confirmada oficialmente por la plataforma.
El éxito sostenido de Alice in Borderland demuestra la fortaleza de las producciones asiáticas dentro del mercado global y su capacidad para mantener el interés del público con historias intensas y visuales impactantes.
La serie se ha convertido en uno de los pilares del catálogo internacional de Netflix, consolidando su influencia más allá de Japón.