La Organización Mundial de la Salud dio a conocer que no cree que el brote de viruela del mono fuera de África requiera vacunaciones masivas, pues medidas como una buena higiene y sexo seguro ayudarán a controlar su propagación.
En entrevista con una agencia de noticias de los Estados Unidos Richard Peabody, quien dirige el equipo de patógenos de alta amenaza de la OMS en Europa, advirtió que los suministros inmediatos de vacunas y antivirales son realmente limitados, sin embargo al otro lado del Atlántico, los Centros para el Control y la Prevención de enfermedades de los Estados Unidos informaron que estaban en proceso de usar algunas dosis de la vacuna Jynneos para usar en casos de la viruela del mono.
El funcionario señaló que las medidas más efectivas que tiene contemplada la organización son el rastreo de contactos y el aislamiento, pues no es un virus que se propague con mucha facilidad y que hasta ahora haya causado una enfermedad grave.
Las autoridades de salud pública de Europa y América del Norte están investigando más de 100 casos sospechosos y confirmados de la infección en lo que ya es el peor brote fuera de África, donde la enfermedad es endémica.
Hasta el momento se desconocen las causas que estén impulsando el brote. La OMS también señaló que no hay evidencia de que el virus haya mutado.