El reconocido director Quentin Tarantino ha expresado su descontento con la dirección que ha tomado la industria cinematográfica, enfocándose más en las ganancias que en el valor artístico de las películas.
Durante su participación en el Festival de Cine de Sundance, Tarantino cuestionó la rapidez con la que las películas pasan de las salas de cine a las plataformas de streaming, señalando: “¿Qué demonios es eso de que una película que se proyecte cuatro semanas, pero la segunda ya esté en televisión? No me metí en esto por las ganancias decrecientes”.
El director de “Pulp Fiction” enfatizó la importancia de la experiencia teatral, destacando que los espectadores que asisten al teatro pagan una cantidad considerable para disfrutar de una película sin distracciones, lo que permite al cineasta tener el control total de la audiencia durante ese tiempo. Para él, se trata de ofrecer una experiencia deslumbrante y brindarles una gran noche, considerando esto como “la última frontera” del cine.
Estas declaraciones reflejan la preocupación de Tarantino por el rumbo que ha tomado la industria, priorizando las ganancias económicas sobre la calidad artística y la experiencia cinematográfica tradicional.